Conocido ya como lunes negro, o black monday, este 5 de agosto se registró el desplome de las bolsas de valores alrededor del mundo, siguiendo a la de Japón, que tuvo la peor caída en su historia. Este suceso se debe principalmente a dos factores, uno en el país asiático y otro en EU.
Asimismo, el nerviosismo entre los inversionistas internacionales se extendió hasta el mercado cambiario, donde varias monedas se depreciaron frente al dólar estadounidense, entre ellas el peso mexicano, que se registra una paridad entre las 19.04 y 20 unidades por billete verde. Situación similar se ve en el caso de las criptodivisas.
¿Qué pasó este lunes con la economía internacional?
Durante la jornada en la Bolsa de Tokio, pasando por las europeas y las americanas, este lunes se registra caos en los mercados financieros, impulsado por el temor a una nueva recesión en Estados Unidos, así como el futuro encarecimiento de créditos por el alza a las tasas de interés japonesas.
Los tres principales índices bursátiles de Wall Street cayeron en la apertura: el Nasdaq perdió 3.10% hacia las 10:00 hora local, arrastrado por la caída de los gigantes tecnológicos estadounidenses, mientras que el S&P 500 cedió 2.48% y el Dow Jones un 2.11%.
Por su parte, las bolsas europeas terminaron también con fuertes caídas. París perdió 1.42%, Londres 2.04%, Fráncfort 1.82%, Madrid 2.34% y Milán 2.27%. En Asia, el Nikkei de la Bolsa de Tokio cerró perdiendo 12.4%, la peor caída en puntos de su historia.
Aunque, en contraste, la moneda japonesa, yen, se revalorizó 2.74% frente al dólar estadounidense, quedando a 142.62 unidades por billete verde, así como 2.10% frente al euro, a 156.58 unidades. Mientras que el índice dólar, que compara la divisa con seis extranjeras, caía 0.6% a 102.65, su mínimo en casi cinco meses.
A la par, el petróleo también se vio penalizado por los temores de recesión, con una pérdida de 0.89%, a 76.13 dólares, en el precio del Brent del Mar del Norte a las 8:00 horas, así como de 0.95%, a 72.82 dólares por barril, en el caso del West Texas Intermediate (WTI), tras tocar un mínimo de seis meses.
Bolsa Mexicana de Valores inicia la semana con caída
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) caía en sus primeras negociaciones de este lunes 5 de agosto en línea con una ola de masivas liquidaciones en los mercados globales debido preocupaciones de que Estados Unidos podría estar camino a una recesión.
¿Por qué se le llama a este día lunes negro?
Por otro lado, aunque al leer sobre bajas de entre 1 y 3% pudiera parecer poca cosa, lo cierto es que éstos representan pérdidas por miles de millones por dos motivos: la primera, los inversionistas están vendiendo sus acciones en algunas empresas, reduciendo su capitalización.
Esto se debe a que, el Banco de Japón (BOJ) subió la semana pasada sus tasas de interés a 0.25%, rompiendo con 30 años de una política al 0%, con lo que los capitalistas podían sacar créditos casi gratis para invertirlos en acciones y bonos en otros países.
Ante ello, muchos inversores decidieron sacar su dinero de las bolsas de valores, en algo conocido como carry trade, para regresarlo a Japón y liquidar sus créditos antes de que éstos se encarezcan.
Por otro lado, también están dejando de comprar dólares y bonos estadounidenses para apostar por otras monedas que pudieran subir de valor y darles mejores rendimientos en el corto y medio plazo.
Antes de la peor caída del índice Nikkei de Japón, desde el lunes 19 de octubre de 1987, el viernes Estados Unidos publicó sus datos de empleo, con resultados más débiles de lo que se esperaba con un aumento a 4.3% en la tasa de desempleo, mientras en los últimos meses se había mantenido por debajo de 4%.
¿A qué se debió el desplome de bolsas del lunes negro?
Aunque analistas refieren que, aunque sí tuvo que ver, la verdadera causa de este lunes negro fue el alza en Japón y el carry trade de quienes contratan deuda en el país nipón o Suiza para apalancar inversiones en activos de mayor rendimiento en otros lugares.
Asimismo, el yen japonés ha subido más de 11% frente al dólar desde sus mínimos de 38 años, a los que había caído hace apenas un mes.
“En nuestra opinión, gran parte de estas ventas se han debido a la capitulación de posiciones, ya que varios fondos macro se han visto sorprendidos por una operación equivocada y se han activado los ‘stops’, empezando por las divisas y el yen japonés”, dijo Mark Dowding, director de inversiones de BlueBay Asset Management, en referencia a valores predeterminados que activan compras o ventas de un activo.
“No vemos pruebas en los datos que digan que estamos ante un aterrizaje brusco”, añadió.
Además, un inversor en Asia, que pidió no ser identificado, dijo que algunos de los mayores fondos de cobertura que operan con acciones sobre la base de señales de algoritmos comenzaron a vender acciones cuando la sorpresiva subida de tasas del Banco de Japón de la semana pasada provocó expectativas de un mayor endurecimiento monetario.
Si bien es difícil conocer las cifras exactas y los cambios de posición específicos que subyacen a los movimientos, los analistas sospechan que las enormes posiciones en valores tecnológicos estadounidenses financiadas por operaciones de carry trade explican por qué están sufriendo más.
Según ING, las operaciones de carry trade, impulsadas por años de política monetaria ultraexpansiva en Japón, provocaron un auge del endeudamiento transfronterizo en yenes para financiar operaciones en otros países. Datos del Banco de Pagos Internacionales (BPI) sugieren que los préstamos transfronterizos en yenes han aumentado en 742 mil millones de dólares desde finales de 2021.
“Es un cierre de posiciones de un ‘carry’ financiado con yenes y de las acciones japonesas”, dijo Tim Graf, jefe de estrategia macro para Europa en State Street Global Markets, quien agregó que “nuestras métricas de posicionamiento muestran que los inversores sobreponderan las acciones japonesas. Estaban infraponderados en yenes y ya no infraponderan el yen”.
Los especuladores han recortado agresivamente las apuestas bajistas contra el yen en las últimas semanas, situando la posición corta neta en el yen en 6 mil 010 millones de dólares, la menor desde enero, que se compara con el máximo de siete años alcanzado de abril, de 14 mil 526 millones de dólares, según los datos semanales más recientes del regulador de los mercados estadounidenses.
“No se puede deshacer la mayor operación de carry trade jamás vista sin que rueden algunas cabezas”, dijo Kit Juckes, estratega jefe de divisas de Societe Generale.