Después de que la pasada administración municipal de Toluca comenzó la limpia de calles de ambulantes, en los primeros meses de gobierno de Raymundo Martínez Carbajal se ha dejado de regular la actividad y el comercio irregular se ha apoderado de algunas zonas de la capital mexiquense.
Desde la población y organizaciones se pidió implementar nuevos mecanismos para regular el comercio ambulante porque perjudica al formal en zonas como la terminal de autobuses, la colonia Ocho Cedros, Sauces, la vialidad Lic. Adolfo López Mateos y la zona de hospitales, al norte de Toluca.
Jorge Luis Pedraza Navarrete, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicio y Turismo del Valle de Toluca, reconoció que el problema es bastante complejo, competencia de la autoridad municipal que debe invitarlos a sumarse a la formalidad y pagar impuestos.
Está difícil, no estamos diciendo que desaparezca (el ambulantaje), estamos pidiendo que se les invite a participar en la formalidad, si se implementan los mismos mecanismos vamos a caer en lo mismo».
Reiteró que se debe buscar nuevas formas o figuras para atender a los comerciantes para que haya una sola formalidad en Toluca.
En recorrido por la zona de los hospitales «Dr. Nicolás San Juan», el Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM) y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), juzgados federales y estatales, Comisión de Derechos Humanos estatal y delegación de la Fiscalía General de la República (FGR), hay gran cantidad de locales y carritos de comida.
En algunos momentos es imposible transitar sobre la banqueta debido a que hay desde locales semifijos, personas con canastas, food trucks, que hacen que no haya espacio para los peatones.
Otra de las zonas complicadas es alrededor de la central camionera, donde abunda la venta ilegal de toda clase de artículos que se busca y comida, situación que se repite en vialidades importantes y colonias.
El presidente de la Canapat Estado de México, Odilón López Nava, aseguró que el comercio irregular se ha disparado en esta administración contundentemente y las autoridades municipales no han hecho nada al respecto.
Además aseguró que notaron que han ido ganando espacios en otras partes de la capital mexiquense.
En algunas viviendas las familias optaron por abrir sus propias cocinas o restaurantes o con las cajuelas de sus carros abiertas para vender productos o alimentos.
