La puesta en marcha del Tren Interurbano México-Toluca “El Insurgente”, es una muestra de que en esta zona del Estado de México, al igual que en muchas partes del país “se construyen casas, pero no ciudades”, mediante las cuales se puedan enfrentar los retos que se presentarán en los próximos años en los municipios por donde transita este medio de transporte: Metepec, la capital mexiquense, San Mateo Atenco, Ocoyoacac y Lerma.
Omar Iván Gómez Guzmán, presidente de Grafeno -empresa enfocada al sector inmobiliario-, llamó a realizar mesas de trabajo en las que participen especialistas para analizar los retos que traerán consigo el crecimiento poblacional de esa zona, ya que se estiman 3 millones de personas para el 2030; además, de la inseguridad y la construcción de vivienda.
“Sería que pudiéramos hacer un llamado al gobierno porque lo que sucede cuando llegan más migrantes, es que se deben construir un gran número de viviendas, y ocurre que se construyen casas, pero no ciudades, y por ende lo del tren interurbano es algo parecido”, aseveró.
Explicó que construir ciudades se encuentra relacionado con brindar cultura, educación y entretenimiento, motivo por el cual se corre el riesgo de que el tren interurbano se convierta en un medio de transporte similar al del metro de la CDMX.
Por ende, consideró importante que el titular de la Secretaría de Movilidad lleve a cabo mesas de trabajo, en donde se incluya a la sociedad civil, al sector empresarial y académico, para construir estrategias que permitan decidir qué se hará con toda la gente que llegará a esta zona de la entidad.
“Vamos a registrar un crecimiento exponencial, y por ende si no construimos comunidad, lo que sucederá es que los problemas de inseguridad, de tráfico y hacinamiento, repuntarán en los próximos años”, manifestó.
Según especialistas en urbanismo, el sistema en las ciudades está en crisis, y por ende se requiere del trabajo conjunto para empezar a detener los daños irreversibles que causa el crecimiento desmedido sin planeación urbana.
Por ende, las soluciones en materia de urbanismo deben salir de instituciones como el Senado de la República y el Congreso de la Unión, las cuales deben legislar para generar cambios en materia de desarrollo sustentable.
