A 15 minutos del centro de Toluca y desde la parte más alta de la ciudad comienza a relucir y a emerger nuevamente el templo construido por los matlazincas dedicado al Dios Tolo, un lugar sagrado y que según las investigaciones era sólo para nobles y sacerdotes.
Al concluir la temporada 2022, arqueólogos y especialistas que trabajaron en el sitio, señalaron que este último año se llevaron a cabo trabajos de restauración y excavación en la plaza oeste, que permitieron intervenir muros de edificios y la localización de piezas.
El arqueólogo de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex), Héctor Pérez García, explicó que entre las piezas encontradas destacan algunas que son resultado de ofrendas, desde vasijas, chicahuaztlis (huesos humanos), fémures en forma de huiro, puntas de flecha y artículos de cobre.
En el lugar se ha trabajado desde 2012 y esta es la quinta temporada de labores en las que intervinieron plataformas, estructuras y la explanada oeste.
La mayor parte de la ocupación del sitio corresponde al posclásico tardío, es decir, del año 1200 D.C., hasta el contacto con los españoles. Fue fundado por la cultura Matlazinca y con evidencia de presencia Mexica a finales del siglo XV, cuando conquistan y extienden su imperio. Héctor Pérez explicó que este espacio está relacionado con el dios Tolo, que da nombre al cerro y del que se deriva el nombre de Toluca.
La arquitecta Regina Jaramillo agregó que hasta ahora se han completado cinco temporadas y estarían planeando ir por la sexta gracias a que hay apoyo y recursos para hacer las indagatorias.
Comentó que hasta ahora son 370 las piezas encontradas, que restauran con técnicas en las que usan herramientas y materiales de la zona.