Una parvada de casi 40 pelícanos permanece en la laguna de “Palmillas”, en la ciudad de Toluca, Estado de México. Vecinos y activistas aseguran que es la primera vez que presencian un fenómeno de este tipo en este cuerpo de agua ubicado al norte de la capital mexiquense. Usuarios en redes sociales difundieron la llegada de las aves a partir de este martes 28 de diciembre, sin embargo, ciudadanos y automovilistas de la carretera Toluca-Atlacomulco fueron los que se detuvieron a tomar algunas fotos de los ejemplares.
Entrevistado, Antonio Martínez, uno de los habitantes de la delegación de San Pablo Autopan, señaló que es la primera vez que observan este tipo de aves y lo atribuyen a la limpieza realizada en la zona en días pasados. “Gracias a Dios nos visitan los pelícanos que es una maravilla. Valió la pena el esfuerzo que hicimos en limpieza y bueno, pues está demostrando lo que estamos haciendo… No queremos dinero no queremos otro detalle, simplemente que se den cuenta un poquito que entre todos se hacen milagros”. Laguna enfrentó sequía Como parte de la sequía que azotó en México a principios de año, esta laguna también se vio afectada y mermada en su capacidad. En mayo pasado, “Acción Juvenil por el Cambio del Pueblo AC” intervino la zona con jornadas de limpieza. Sobre la llegada de los ejemplares, Miguel Estrada Peña, representante de la agrupación, comentó que hay dos teorías en torno a su arribo. “Hay dos hipótesis que puedo mencionar les puedo decir que sean de Canadá o de Estados Unidos esto realmente es algo histórico, es increíble maravilloso para mí porque he preguntado a personas de la comunidad aunque había visto una parvada tan grande de 35 a 38 pelícanos que hay en la zona y se cree que a causa de las sequías que asecharon a la República Mexicana llegó este tipo de aves migratorias”. Ya también refirió que “se cree también que estos pelícanos vengan aquí por refugio, por descanso y para encontrar alimento para seguir su paso hacia su principal destino”, que es Jalisco y Michoacán. Cabe señalar que este cuerpo de agua también sufren los estragos de la contaminación, ya que diversas comunidades tienen conectados canales de desagüe. Las indicaciones para los habitantes son evitar alimentar o ahuyentar a los especímenes.
