Pega la delincuencia a taxistas del valle de Toluca

Una organización asegura que en promedio se roban 10 unidades al mes; la Terminal de Toluca y Metepec, donde más abordan los delincuentes

El servicio de transporte público individual tipo taxi, promedia por mes alrededor de 10 unidades robadas en el Valle de Toluca, aseguró Osvaldo Martínez, presidente de Agrupaciones Unidas de Transportistas del Estado de México (ATUEM).

El líder de la agrupación advirtió que son las rutas de la zona Terminal de Toluca y Metepec, donde los delincuentes abordan los taxis y en el transcurso a su destino cometen el despojo a los operadores.

«Se roban un promedio de diez taxis al mes en el Valle de Toluca, son grupos de delincuentes que abordan como si fueran clientes», mencionó.

Según la ATUEM el número de robos por semana es de tres unidades que son desmanteladas y algunas vendidas por partes en el mercado negro o abandonadas en zonas rurales.

Osvaldo Martínez advirtió que dicha situación genera pérdidas económicas de más de un millón de pesos por mes para las agrupaciones y dueños de los taxis.

Dijo que la situación es complicada, pues en medio de la pandemia de Covid-19, el número de servicios diarios redujo de forma sustancial y gran parte de los operadores paga el crédito de sus unidades o la renta de placas de servicio público.

«Estamos perdiendo más de un millón de pesos al mes por los robos de unidades», lamentó Martínez.

Pérdidas por mercado negro

Las pérdidas por robo de autopartes en líneas del transporte público que prestan servicio en el Valle de Toluca, equivalen hasta 200 mil pesos cada mes.

De acuerdo con Alejandro Hernández Torres, presidente de Servicios Urbanos y Sub-Urbanos Xianantécatl, pese a que el promedio de asaltos contra esa empresa disminuyó en 2019, el robo de autopartes persiste y considera pérdidas millonarias por lo caro de los accesorios.

El promedio de mermas es similar para el resto de las empresas urbanas y foráneas, según datos de a Cámara Nacional Nacional del Autotransporte Pasaje y Turismo (Canapat).

Una de las más afectadas es Flecha Roja, la cual también es blanco constante de secuestro de unidades por los normalistas de la escuela de San José Tenería.

Los grupos del crimen que se centran en este tipo de ilícitos operan de forma altamente sofisticada y su negocio es sobre todo desmantelar las unidades y vender las autopartes en el mercado negro.

«Se llevan las unidades y les quitan las llantas, los turbos y las computadoras, con eso es más que suficiente para tener pérdidas millonarias», mencionó el empresario.

Otro tipo de unidad rentable para el crimen son los taxis, pues la dirección General de Combate al Robo de Vehículos y Transporte de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) en promedio recupera por mes 30 a 40 taxis mediante los operativos permanentes.

Según el modus detectado por la corporación, la mayoría de los vehículos son desvalijados en bodegas clandestinas para luego trasladarlos en autopartes al mercado negro de la Ciudad de México y el estado de Guerrero.

Donde los propios transportistas son sus clientes y quienes pagan por este tipo de material, revelo Odilón López Nava, delegado de la Canapat.

“Las partes robadas son compradas por algunos choferes y empresarios, nadie más compra ese tipo de accesorios”, dijo López Nava.

Cabe destacar que las 29 empresas, incluidas taxis, que operan en el Valle de Toluca se encuentran en la peor crisis de los últimos años debido a la pandemia del Covid-19.

Aunque la Canapat no ha dado a conocer sus números del último año en cuanto incidencia delictiva, el número de asaltos y robo de unidades ha ido en aumento, según los propios números del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).